La única lucha que se pierde, es aquella que se abandona.

La única lucha que se pierde, es aquella que se abandona.
Hay amores que matan, pero el tuyo... Me ha resucitado

viernes, 27 de julio de 2007

A MIS PADRES


"Hace algunos ayeres, en mi adolescencia, me sentía muy sola, muy triste y desubicada, mis primeros intentos de manifestar lo que sentía através de las letras me llevaron a escribir este mi primer poema"


Demasiado tarde
Llegan muchas veces,
Las palabras de amor
Que deseaba escuchar.

Demasiado tarde
Le dice una madre,
A su hijo, ya hombre,
Que lo ama en verdad.

Demasiado tarde
Llega la ternura,
Que tanto esperaba
Y no supiste dar.

Demasiado tarde
Te diste cuenta,
De que ya era hora
De no vernos más.

Demasiado tarde
Tu rostro cansado,
Quiso darme el beso
Que no supo dar.

Demasiado tarde
Porque no hace falta
Que hables conmigo
De lo que ya sé.

Demasiado tarde
Se dan cuenta ustedes,
Que sola en mi cuarto
Los necesité.

Demasiado tarde,
Demasiado tarde…
se dan cuenta padres,
cuánto los ame.

HUBO UN DÍA FELÍZ



Hubo un día, hace muchos ayeres,
Un día que nunca viví,
En un País lejano y desierto,
Ese día yo te tuve a ti.

Hubo un sol que no vi nacer
Y alumbró nuestro día feliz
En un tiempo que nunca llegó
Y la esperanza que no floreció.

Hubo también una noche estrellada
Y la luna paciente miraba,
¡Tú reías, cantabas, saltabas!
Y yo gritaba cuánto te amaba.

Mas nunca existió aquel día
Y esa noche; nunca fue creada,
Fue un sueño de tonta enamorada,
Me di cuenta hoy… cuando despertaba
.

miércoles, 25 de julio de 2007

A MI MANERA


" Y en cualquier lugar que nos sorprenda la muerte... bienvenida sea"
Ernesto Che Guevara.


Podría ser cáncer… esas fueron las palabras frías, vacías y ahora que lo pienso, tan poco profesionales de la doctora que me atendía.

En un segundo sentí que el piso se me hundió, tomo forma y sentido aquella frase tan popular: “me cayó un balde de agua fría”.

Salí del consultorio con un sentimiento de impotencia, faltarían semanas de estudios y análisis para estar seguros de que “aquello” no representaba un problema para mi salud.

Pensé en mi vida, pero sobre todo y como nunca antes, pensé en mi muerte. La gente llora cuando pierde un ser querido, pero si tú mueres… los pierdes a todos.
Malena Ortega Rosado, mi nombre, el nombre que me ha acompañado durante 28 años de vida, 28 años que todavía ayer me parecían demasiados… ¡nos estamos haciendo viejas! Decíamos las amigas, hoy, sin embargo, me parecen tan pocos.

Fui una niña feliz, tan feliz como se puede ser viviendo en un D.F. en los 80’s, (con todo y terremoto). Fui una adolescente loca y una joven adulta que hasta hoy creyó tener un gran futuro.

He amado y he sido amada. He viajado, conocí lugares y gente distinta a mí, en otro continente. He caminado los caminos, recorrí los recorridos, a veces en coche, camión, avión… nunca en barco.
Éste parece ser el recuento de una corta vida, llena de tanto y vacía de tan poco.
No he escrito un libro, no he sembrado un árbol y al parecer nunca tendré un hijo. Nunca me he casado, y lo he soñado tantas veces, un bello vestido, flores, una linda iglesia...

No sé jugar tenis, ni tocar el piano, no hablo otro idioma… pero he reído, he reído mucho, he reído tanto que algunas veces que hasta me han salido las lágrimas.
Hasta hoy, soy consciente, en mi irreverente juventud, de la verdadera muerte, la mía.

Hasta hoy, hago este diminuto recuento de miles de asuntos interminables, de los muchos círculos no cerrados y de infinidad de perdones inconclusos.

Es hoy, cuando soy capaz de recorrer el camino hacia atrás y no pensar en los errores sino en los aciertos.

Es hoy cuando me enfrento a un diagnóstico incierto con el posible fin de esta vida.
La conclusión en este breve espacio de meditación y soledad es que he sido millonaria, millonaria de cuanto amor se puede tener en este sombrío mundo. Desde el incondicional amor de mis padres, pasando por el fraternal amor de mis hermanas queridas. Abuelos, familia, amistades.


Nuevamente aquel consultorio, ultrasonidos y análisis en la mano, los toma, los revisa… sonríe, “no es nada” y fin.

Se termina la angustia, siento como alguien quita esa gran lápida que yo misma coloqué sobre mis hombros. La danza del universo vuelve a colocar las piezas en el gran ajedrez de la vida, ahora me corresponde saber jugarlas, como siempre, como hasta ahora, entregando el TODO por lo que sea y viviendo cada día como si fuera el último… viviendo cada día a mi manera.

€n ël Jå®dín dë Ùn $üëñø


"Solo el amor puede hacer que los sentimientos se manifiesten en bellas palabras"


En el jardín de un sueño,
mi espíritu moribundo
no encontraba salida
e intentaba huir del mundo.

Soñando con algo hermoso,
alguien que nunca llegaba.
y en el jardín de un sueño,
mi ángel se acercaba.

Su mirada transparente,
cuando todo se nublaba,
su cuerpo hermoso y tibio
mientras yo me congelaba.

Se agachó mi tierno ángel,
me levantó de aquel lodo,
y en el jardín de un sueño…
se convirtió en mi todo.

Hoy, el frío quedó atrás,
y mi espíritu no para,
en el jardín de un sueño
mientras mi ángel me ama.

Ese lunes...


“Ese lunes la miraba desde arriba y Rocío se sintió sola”

Años atrás Rocío vivó los momentos más felices de su vida, al menos así lo recordaba, era solo una niña cuando conoció a Rodolfo un hombre encantador a quién idolatro de inmediato.

“Ese lunes la miraba hacía abajo y Rocío sintió que ya no tenía voluntad”

Rodolfo le dijo siempre que era solo suya y jamás nadie la amaría como el, Rocío se sintió única y feliz, él la amaba, la amaba a pesar de todos sus defectos. La madre de Rocío siempre se los hizo notar: -Ay hijita que feita estás, pobrecita de ti, que burra eres, que torpe, no haces nada bien.


“Ese lunes la miraba desde arriba y Rocío sintió el ultimo rastro de dignidad marcharse”

Roció despertó aquel día a las 5:00 a.m., como siempre, subió a la azotea de la vecindad a lavar ajeno, al regresar a su casa sintió aquél escalofrió que ya sabia reconocer, y que invadía su cuerpo cada ves que Rodolfo llegaba tomado a casa.

“Ese lunes la miraba hacia abajo y Rodolfo se sintió poderoso”

Rocío sabia muy bien que al bajar las escaleras y entrar a la casa seria humillada y golpeada sin razón, simplemente por ser ella, por contestarle, por no contestarle, por amarlo o por odiarlo, así seria, como era antes con su madre, con su padrastro, con sus hermanos y con sus propios hijos, que la dejaron sola.

“Ese lunes Rodolfo la miro hincada frente a el, la tenia agarrada del pelo, como siempre, pero ese lunes todo era diferente”

“Ese lunes Rodolfo no solo consumió alcohol y había ganado una pistola cargada en un juego de billar”

“Ese lunes Rocío no sintió miedo, respiro alivio”

“Ese lunes, por primera ves en 30 años Rocío le sostuvo, desafiante, la mirada”

“Ese lunes al verlo, Rocío le sonrió triunfante, cerro los ojos, y cayo en un charco de su propia sangre mientras escuchaba el sonido sordo de la bala”

“Ese lunes, Rocío descansó. Y también por primera ves, ese lunes fue Rocío quien vio a Rodolfo desde arriba… mientras lo arrestaban.”

"La violencia es quizás la más violenta violación de los derechos humanos y quizás la más generalizada. No conoce límites geográficos, culturales o económicos. Mientras continúe, no podemos afirmar que estemos logrando progresos reales hacia la igualdad, el desarrollo y la paz."

Kofi Annan, Secretario General de las Naciones Unidas

Al menos una de cada tres mujeres en todo el mundo ha sido golpeada, coaccionada sexualmente o ha sufrido otro tipo de abuso en su vida.
En un informe del Banco Mundial, se estimaba que la violencia contra la mujer era una causa de muerte e incapacidad entre las mujeres en edad de procrear tan seria como el cáncer y una causa de mala salud más frecuente que los accidentes de tráfico y la malaria juntos.

En México:
· En uno de cada tres hogares del Área Metropolitana de la Ciudad de México, se registra algún tipo de violencia.
· Los miembros más frecuentemente agresores son el jefe del hogar, 49.5%, y la cónyuge, 44.1 por ciento.
· Las expresiones más frecuentes de maltrato emocional son los gritos y los enojos mayores Las formas de maltrato que con más frecuencia se presentan en la violencia física, fueron los golpes con el puño,
Las muertes por homicidio y suicidio de mujeres de 15 a 39 años tienen un peso singularmente mayor que el registrado por el total de los decesos por causas violentas femeninas. En el grupo de 20 a 24 años, una quinta parte de las muertes violentas registradas fue por homicidio, y en el de 15 a 19 años, una de cada seis mujeres falleció por suicidio.